Entre Visvique y Arucas

Jueves, 31 de Agosto de 2011

Día espléndido, con un cielo limpio y sin calima, con un celeste intenso como hace tiempo no se veía en la ciudad, solo alterado por algunas nubes blancas de aspecto algodonoso, pareciera que el verano empieza ahora para la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, que hubiese llegado con retraso y que ahora comienza el calor. Así fue este día elegido para hacer una de nuestras pequeñas excursiones fotográficas.

En Visvique, pequeña población próxima a Arucas, detenemos el coche y esperamos la llegado de Jesús, que se nos unirá en esta ocasión en nuestra salida. Una vez reunidos, buscamos el inicio de un pequeño sendero o camino que conecta Visvique con Arucas en un corto trayecto de unos dos kilómetros, nos costaría un poco localizar el inicio de ese camino, sorteando casas y calles, pero al fin llegamos.

El camino transcurre por un paraje con escasa vegetación y la que hay está ya bastante seca por el calor, solo persisten pequeños matorrales verdes con flores amarillas. El trayecto del camino bordea pequeños embalses o estanques, como el que se observa en la imagen anterior y en la que se pueden ver las casas de Visvique al fondo.

Hasta nueve de estos embalses pueden encontrarse en su camino, algunos están secos y otros aún conservan algo de agua, esto hace que proliferen por la zona libélulas y otros insectos, sobre todo muchas arañas tigres y de considerable tamaño, perfecto lugar para los aficionados a los macros y con esa intención visitamos el lugar.

Al inicio del camino se observa al fondo la montaña de Arucas y la población del mismo nombre, tal y como se observa en la imagen anterior.

Detalle de un pequeño palmeral.

Algunos de los embalses por los que atraviesa el camino.

Imagen de la Iglesia de San Juan Bautista, popularmente conocida como catedral de Arucas aunque no es una catedral.

La imagen de Visvique se refleja al caer la tarde en el agua de uno de estos embalses.

Y para terminar la jornada la Luna llega a uno de estos tranquilos embalses, donde da gusto escuchar el sonido de la noche, grillos y ranas nos despiden por hoy.